El pueblecito de Vejer de la Frontera posee uno de los más bonitos y mejor conservados Conjuntos Histórico Artístico de España. Debido a su carácter eminentemente defensivo, la antigua Villa de Vejer está rodeada por el Recinto Amurallado, cuyo trazado es irregular al ir ajustándose a los desniveles del terreno.
Está flanqueado por cuatro puertas: Arco de la Segur, Arco de Sancho IV, Arco de la Villa y Arco de Puerta Cerrada, y por dos torres: La Torre del Mayorazgo y la Torre de la Corredera.
El núcleo de la localidad está enclavado en una montaña de 200 metros de altura, a orillas del río Barbate y a 8 kilómetros de distancia de la costa, concretamente de la playa de El Palmar.
Pureza y blancura en sus calles, frescura en sus patios, y ese sabor a la vida que solo se puede experimentar en los pueblos andaluces con tanta historia como Vejer.
En la parte más alta de Vejer se emplaza el castillo, declarado monumento nacional en 1931. Una fortaleza construida entre los siglos X y XI sobre los restos de un castillo árabe.